Escribe: Moisés Panduro Coral
No es usual que lo haga, pero quiero expresar mi reconocimiento a la Contraloría por el informe de control que pone en evidencia el desastre de inconsistencias, sobrevaloraciones e ilegalidades en las que está hundido el expediente técnico de la obra del Hospital Regional de Loreto.
El aplastante informe ha logrado detener esa pretendida licitación, y ha evidenciado que:
- Tratándose de una obra de alta complejidad, la actuación del gobierno regional de Loreto ha sido ilegal, al utilizar una simple ficha técnica, en lugar de un estudio a nivel de perfil, lo que ha hecho que establezcan un costo total sin detallar ni sustentar el desagregado de costos de sus componentes. Es decir, lo hicieron a la paporreta.
- El informe de consistencia que es requisito para el registro del expediente técnico no cuenta con la seriedad profesional y la rigurosidad técnica que demanda una obra de esa magnitud. En dos palabras: No sirve.
- Esa falta de consistencia ha determinado que el proyecto se incremente sucesivamente de 616’631,611.57 de soles a 960’139,082.27 a mayo de 2024; luego a 1,107’241,558.45 soles a julio de 2024, y últimamente, a 1,159’017,550.38 soles a diciembre de 2024.
- En consecuencia, el expediente técnico utilizado para convocar la licitación de la obra del Hospital Regional de Loreto tampoco sirve, porque carece de evidencias que sustenten objetivamente los costos de inversión, lo cual afecta el principio de legalidad y puede generar un grave perjuicio económico a la entidad.
- Que se haya detectado, aleatoriamente, insumos sobrevalorados por 28 millones de soles en dos partidas (transporte de materiales y equipamiento con computadoras), obliga a realizar un peritaje de todo el expediente técnico. Si una muestra sale gangrenada, es obligatorio revisar cómo está el resto del tejido, pues seguro que la pus va a saltar en donde aprietes.
- Todo lo anterior sólo lleva a una conclusión: Tienen que empezar el proyecto de nuevo, desde la pre inversión. No les queda otra. No pueden validar lo que empezó mal y acaba de terminar mal.
Buen trabajo de control. Si así se hubieran revisado los expedientes técnicos de escuelitas, pistitas, vereditas y otras cositas, estoy seguro que se hubiera detenido algo de esa hemorragia de cientos de millones del dinero público que ha sangrado a Loreto, y que ha sido provocada por las sobrevaloraciones hartamente conocidas.
Pensé que solo yo, unas voces más y dos o tres medios, somos los “desestabilizadores” de la gestión y del partido del gobernador regional René Chávez. Pero, no. Ahora, parece que se ha sumado la “desestabilizadora” Contraloría.
Moisés Panduro. Lima, 26.02.2024